jueves, septiembre 28, 2006

Gusito

El lunes tuve clase con Ciuco. Fue la primera clase que no me gustó. Demasiado incoherente. Primero nos habla de la necesidad de compromiso del fotógrafo... y pone como ejemplo la pasarela Cibeles, las modelos anoréxicas y cuestiona el porqué los fotógrafos no se niegan a hacer determinadas fotografias... pero luego, no sé a cuento de qué, nos habla de una amiga yuppie que tiene, y del tipo de vida que lleva... y de la imposibilidad de cambiar ese tren de vida porque tiene que pagar una hipoteca, unos gastos, mantener un status... ¿?. A una se le ocurre que un fotógrafo vive del aire...
Menos mal que aparece Pablo...que es alucinante. Con sus fotones y sus orquideas... Y sus salidas al botánico... y su saber contagiar la pasión por la luz, por la foto...por la vida.

Y ayer quedé con un amigo que hacía tiempo que no veía... Después de una entrevista de trabajo, extraña y poco productiva (vamos, que no me convence mucho). Unas clases de ofimática a jubilados...mal pagadas y en la otra punta de Madriz. El caso es que cuando me lo ofrecieron recordé que hace unos meses le comenté a mi madre de colocar tres o cuatro ordenadores en el centro de día... e ir los sábados in the morning a darles clase como voluntaria. Así que cuando me ofrecieron esto... me hizo gracia. Sin embargo... está mal pagado y no sé si aceptarlo porque afecta mi "otro sueldo".

Luego paseé por Madrid. La Plaza Mayor... puertas varias.. calles varias. Sentado en un café... me encontré leyendo el periódico a Rafael Álvarez (el Brujo). Hubo un tiempo que conocí otro Rafael Álvarez... un amigo de partido de Albert. Y no me había dado cuenta de que es el mismo nombre hasta ahora... Tuve la tentación de hacerle una foto...pero me corté.. Seré tonta. A ver qué día aprendo a sacar la cámara donde sea, a pedir permiso (o no) y a soltarme como una loca...

Mañana voy a Granada. Tengo ganas. Tengo ganas de esos abrazos y esos besos que me promete, los que me susurra al oído por teléfono.

domingo, septiembre 24, 2006

Volver a casa....

Un regreso pelín accidentado, con pinchazo (de rueda) incluido a la entrada de Zaragoza. Un café improvisado. Reencontrarme con los amigos. Echar unas risas a las tantas de la noche. Un "chivato" de regalo para adobar los cigarritos (gràcies, Josepe, per aquestes caixes plenes de "coses"). Y darme cuenta a las cinco de la mañana, que las llaves de mi casa (mi casa de verdad, esa que siento mía aunque más de la mitad pertenezca al banco) se quedaron en Madrid. Presentarme a las cinco y media en casa de mi madre. Para eso están las madres, me dice, para abrirte la puerta en cualquier momento. Y dormir en esa habitación de adolescente, que aún conserva libros y muñecas de otros tiempos.
Así que entro en mi casa el sábado por la mañana (he descubierto que la calle donde vivo.. tiene una página web, que esta AQUI). Y reconozco ese olor...y recorro con la mirada cada una de las espirales. Si pudiera traladarme con ella entera, con la cáscara, igual que un caracol... Sólo dos días, y tantas cosas por hacer. Y tantos amigos para abrazar... Reparar la rueda se convierte en comprar una nueva (al menos la llanta se puede aprovechar). Como con mi tía y mi madre... qué bueno sería eso de tener hermanas, aunque sólo fuera para darte cuenta de las diferencias. Luego ese trabajo pendiente (esa foto en un cuarto de baño oscuro...), algo que tengo que entregarle a Pablo Esgueva el martes próximo... (ya veremos, porque la idea es buena, o al menos a mí me lo parece, pero el resultado no me convence, y no hay nada peor que un trabajo del que no estás convencido). Ver a Tere. Cenar con Pau. Y hablar hasta las mil con alguien que empiezo a echar de menos cuando no está. Y esta mañana, tengo un montón de cosas por recoger.... entre ella a la nena i a neng, que vienen del Nepal. He quedado con Carlos (mi cari...mi niño... mi otro trocito) y con el noviu de Mariagnes (qué extraño suena eso) para ir al aeropuerto.
Y luego volver a Madriz. ¿Volver a casa?. Mi otra casa. La casa adoptiva.
Me llevo unos cuadros. Estan pintados sobre seda por una chica de aquí. Uno de ellos es la Torre del Agua, el otro el Portal de Sant Roc y por último la iglesia que sale en las escrituras de mi casa... esa que toca pared con pared y que me despierta a campanadas...

miércoles, septiembre 20, 2006

Echo de menos

..a mi madre,especialmente. Y mi casa. Y mis cosas. Y a mis amigos. Y ciertos olores. Y el mar (sí, lo echo de menos). Y ver la Mola y el Montseny. Y el jazz de los jueves con Pau. Y los cines Icaria. Y mis compis de curro. Echo de menos a Carlitos y sus caris. Los achuchones de algunas amigas. Las cenas improvisadas. Las comidas con Yolanda. Y las paellas de Juani. Echo de menos la ciudad gris que me ha acogido durante dos años... a la que a ratos tengo ganas de volver. Echo de menos los MacDonalds con mi churrita. Y a Josepeillo y su ternura. Y hacer fotos con Víctor los domingos in the morning...

martes, septiembre 19, 2006

Los contenedores


El trayecto de la escuela a casa siempre es el mismo. Para ir atravieso por la Estación de Atocha. Para volver, prefiero la glorieta... Paso por los mismos bancos todos los días. Y encuentro las mismas caras. A la ida están sentados. La mirada perdida. A la vuelta, la mayoría duerme.
Todas las ciudades tienen esa cara. La otra cara de los museos, los parques y los restaurantes caros, donde disfrutar de la gastronomía local. No me acostumbro todavía (ojalá nunca lo haga). Por eso me sorprendo cuando llegando a casa me encuentro varias familias rodeando un contenedor donde alguien del super de al lado debe haber tirado los productos caducados. Una pareja de inmigrantes jovenes, un matrimonio mayor... con un carro de la compra, sacando del contenedor yogures, verdura y cajas de leche. No es espantosa la imagen. Sólo es triste. Pero ya es bastante.

sábado, septiembre 16, 2006

Metro vs Tube

Que el metro de Londres tiene su complicación...nadie lo duda. Pero el de Madrid también tiene telita. Aquí un mapa. Pero ni siquiera con un mapa en la mano puedes estar convencida de llegar donde tienes que llegar. De entrada... va al revés. Con lo cual tu vas mirando todo el rato hacia un lado del túnel y de repente esté en el andén y no sabes ni como. Luego, está en obras. Así que hay un par de lineas prácticamente enteras sin funcionar y algunas estaciones que parecen a punto de caerse (aunque no... la idea es justo lo contrario). Por último están las catetas como yo... que suponen que el ticket se introduce a la entrada y a la salida... y resulta que llevo todo el trayecto el billetito en la mano... y cuando llego a la salida veo que el manubrio aquel de salida funciona sin introducir nada. Con un poquito de tiempo espero irme acostumbrando..

El miedo

Dice Pablo que el mejor veneno es el miedo y el mejor antídoto el conocimiento. Se generó una pequeña discusión en clase sobre lo que nos paraliza y lo que hace movernos en el mundo.... y si realmente el conocimiento genera movimiento. Pero no es lo mismo conocimiento que información. Estamos en la era de la información (¿digital?)... y en la que a pesar de tener tanta... conocemos tan poco.
Me vine a Madriz muerta de miedo. Espero irme muerta de conocimiento :) Todavía no tengo claro donde iré. Si de vuelta a Barcelona, si directa al cono sur a fotografiar pingüinos emperadores (algo en la carpeta de pendientes) o.... quién sabe...
Ayer hablé con mi padre. Echo de menos el norte.

jueves, septiembre 14, 2006

Los profes de EFTI....

Fernando Marcos... mi tutor. Físicamente me recuerda al güey... Tiene los ojos tristones (¿por que coño me gustan a mí los tipos con los ojos tristones?). Nos estuvo hablando del fotómetro, de la carta de grises, de la luz reflejada y la incidente, de los sistemas de medición de la luz en la cámara... y de un par de alumnos japoneses que tuvo hace unos años que les llamaban Los Chunguitos... (una de esas anécdotas que si la explico ahora no tiene gracia). Encontrais fotos suyas en Fotoescenica...increiblemente hermosas.
Pablo Esgueva.... el tipo que me hizo llorar...Este hombre es hiperactivo pero a pesar de ese nervio... tiene una manera increible de transmitir. Dos pasiones: la fotografía y las orquídeas. Nos habla de los orígenes, de como empezó él.. de como la imaginación puede suplir la falta de medios.. de la temperatura del color...de sus pinturas, de sus orquídeas.. y de la pasión que hay que ponerle a una profesión dura.
La clase con Felipe García fue muy técnica, pero muy enriquecedora. El flash de mano, la velocidad de sincronismo, los diferentes modos, casos concretos para trabajar, esquemas de iluminación...
Y entonces llega Valentín Sama y sus emulsiones fotográficas. ¿Sabíais que las películas se hacen con una mezcla de sales y gelatina de vaca? Nos estuvo dando un montón de información de esa que no sé si tengo suficiente espacio en la cabeza ni si mis neuronas ya no pueden procesar. Pero aluciné con la cristalografía y el proceso físico de producción de las sales que permiten las exposiciones...
Ayer fue la segunda clase con Pablo... y ya nos ha pedido un trabajo (¿?)... ya veremos.. y hoy tengo clase con Rosalind Williams.
Me apetece hacer algo más técnico.. escribir sobre lo que me han explicado hasta ahora (que realmente es mucho), pero de momento anda todo en una libreta y realmente no sé si es muy útil para el trabajo que supone :S. De todas formas, en el blog de Valentin hay un monton de información... (realmente interesante)

martes, septiembre 12, 2006

Las gentes... la vida cotidiana en una ciudad

Parece que la pobreza es más patente en Madrid. Paseas, y el porcentaje de gente que parece que vive bajo ese mínimo que roza el umbral de la pobreza parece mayor. O es que realmente en Barcelona somos más modernos. O es que la exportación de pobreza que se hizo durante las olimpiadas… no fue realmente una leyenda urbana.
De repente alguien se acerca sigilosamente y te susurra prácticamente al oído: “¿Le importaría darme alguna moneda para comprarme un bocadillo?”. Y te giras… como si de un fantasma se tratase, y te encuentras a un hombre normal, quizás un poco más delgado de lo saludable, vestido antiguo… pero bien… como podría ser mi padre. Y se me mezclan las sonrisas y las lágrimas, porque nunca sabes qué hacer en una situación así.
Luego hay otra cara. La de las mujeres entre cincuenta y una edad indefinida. Con tacones , cinturón y bolso a juego. Llenas de colgajos dorados y piedras. Pintadas hasta los huesos. Bronceadísimas y rubias teñidas….Con pellejos en lugar de piel.
Pero la gente es normal. A veces igual me parecen hasta excesivamente normales. Y me gusta. Porque eso es lo que me da la sensación de barrio.

domingo, septiembre 10, 2006

El cielo de Madrid

Dicen que es diferente. Que es más azul. Y que aquí se está mas cerca del cielo. No sé que tiene de cierto, pero lo que es verdad es que éstos... ESTOS SON OTROS CIELOS.
Y eso me recuerda un libro de Bernardo Atxaga, ese escritor tan polémico y tan rural... y tan especial. Personalmente prefiero Dos Hermanos, aunque ninguna de sus obras tiene desperdicio....